EN LA MUERTE DE DOÑA DOLORES
AGUIRRE YBARRA
Ha fallecido la
señora ganadera bilbaína Doña Dolores Aguirre Ybarra. Se ha ido
una gran señora y una ganadera irrepetible. De tronío.
Sus atanasios se
quedan huérfanos de madre. Entregada durante décadas a la crianza
del toro serio y bravo. En su preciosa finca "Dehesa de Frías" de Constantina ( Sevilla
) pastan sus impresionantes toros que tantas tardes de emoción han
dejado en los ruedos de las plazas más exigentes.
Su pasión por
el toro serio fue una constante en su trayectoria. Decía que el toro
tenía que imponer respeto siempre. La selección siempre orientada a
un toro que se moviera y que tuviera poder y casta para aguantar una
lidia exigente. Consiguió ese toro y se posicionó dentro del
selecto grupo de ganaderías “toristas”. Predilecta de aficiones
toristas; Bilbao, Pamplona, Madrid, entre otras y por supuesto
Francia donde sus toros son demandados en muchas ferias.
Dolores Aguirre Ybarra. |
El toro de Doña
Dolores impone respeto por su trapio. Toros amplios, con mucho
esqueleto, generosos y astifinos pitones y grandes por donde se
miren. Amplios pechos y fuertes culatas.Toro al que hay que picar
casi siempre en tres puyazos. Muy poderoso en el caballo. He visto a
toros de esta casa recibir tres y cuatro puyazos terroríficos y
llegar a la muleta con una movilidad enorme, trayendo de cabeza a los
toreros.
Toros amplios de gran trapío. |
La principal
virtud de estos toros ha sido la transmisión, embestidas
emocionantes de trazo largo. Toros de más de seiscientos kilos
persiguiendo las muletas con celo y metiendo los riñones. Para estar
delante de ellos se necesita mucho valor y técnica. Para aguantar
ese volumen viniendo como el tren hay que ser muy macho. Un toro con
un gran poder en todos los sentidos. El Califa lo sabe muy bien.
Salió dos tardes en Madrid con toros de Dolores. Pepín Liria salió
lanzado con una faena inolvidable en Madrid. Rafaelillo y Joselillo
despuntaron sus carreras con triunfos a ley con los aguirres. Otros
muchos toreros también probaron el licor amargo de estos toros
pasando tardes difíciles o visitando las enfermerías
Nada era fácil
con este ganado. Triunfar con una de Aguirre es una medalla en la
hoja de servicios de cualquier espada. Una condecoración en la
guerrera.
Le salían
fieras indómitas y también toros que humillaban con largo recorrido
regalando embestidas para torear bien.
Por eso Dolores
Aguirre ocupa un lugar en el corazón de los aficionados al toro de
casta brava. Y también en la memoria de los toreros que se
enfrentaron y triunfaron con ellos. Se ha ido una gran aficionada y
una gran ganadera.
Se la echará de
menos en su barrera de Vistalegre en Bilbao. Y en esta feria de
Sevilla que acaba de empezar donde era habitual en su abono. En los
sanfermines donde le adoraba la afición. Y por supuesto en su plaza
de Madrid donde era admirada y respetada.
Pocos ganaderos
sufrían tanto como ella cuando las cosas no salían bien en los días
importantes. Y disfrutaba con orgullo cuando daba una gran tarde de
toros. Recuerdo sus sinceras autocríticas cuando manseaban sus
toros, sus nervios rotos las tardes que lidiaba. Mujer apasionada y
con las ideas muy claras sobre el toro bravo. Seriedad, emoción y
casta fueron sus banderas.
Descanse en paz
Dolores Aguirre, ganadera de leyenda y excelente aficionada.
Temidos en las calles de Pamplona, por San Fermín. |
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