LOS ANTITAURINOS SIGUEN DANDO LA BRASA.
Qué bonito sería que las calles de nuestras ciudades se vaciaran de gente para ir al bar o al sofá de casa a ver una corrida de toros como sucede con el dichoso fútbol; el circo de nuestros días.
Muy lejos estamos de eso. Se ha trabajado mucho para que el escenario sea el contrario. La prensa, políticos sectarios y los modernos pensadores que "orientan las mentes" han sacado a los toros de la primera plana. Ignorar los toros y atacarlos en el momento oportuno es su estrategia y es lo moderno.
Lógicamente cada vez hay menos afición porque no se fomenta y se destruye si se puede cuando se buscan un puñado de votos.
Recientemente en el pueblo guipuzcoano de Cestona se ha celebrado un referéndum para suprimir sus novilladas anuales que tienen mas de 350 años de antigüedad. Con alcaldía de Bildu ha ganado la opción de seguir con la vieja costumbre taurina. En otro pueblo de Extremadura se ha preferido destinar fondos para los toros que para ayudas al desempleo. La tradición de este grandioso espectáculo ha vencido a los ataques ante la disyuntiva; cual Pilatos en el templo de Jerusalén.
Ejemplos aislados pero importantes como estos; son ilusionantes.
Pero por otro lado tenemos a Cataluña y su prohibición política con tintes antiespañoles y provincianos. Galicia, Asturias, Canarias y Baleares van en esa línea. Las vascongadas han perdido muchas plazas que antaño fueron importantes. San Sebastián corre peligro de muerte. Su alcalde actual ha declarado a Donosti ciudad antitaurina para el año que viene. Con la gran afición que siempre hubo allí. Su Semana Grande de Agosto puede morir porque a este señor se le pone en la bragueta. Azpeitia, Bilbao, Orduña y pocas más sobreviven al antitaurinismo.
Hoy leo, que en Bogotá, su alcalde ha decidido prohibir la muerte del toro y hacer una corrida sin sangre o sustituirla por lecciones de cultura, en la misma plaza de toros. Qué gilipollez.
En Quito el año pasado se prohibió la muerte del toro en el ruedo dejando las faenas sin suerte suprema.
Los enemigos de la fiesta van ganando terreno poco a poco. También muchos otros políticos defienden y protegen los toros con declaraciones de interés cultural. Pero no es suficiente.
Se necesita una difusión, una educación taurina y una protección decidida de nuestra tradición y señas de identidad. No es de recibo que en la televisión pública se dedique media hora a la semana y se prohiban las retransmisiones de corridas en directo “para proteger a los niños en horario infantil”. Hipócritas y mentirosos.
Ignorando este noble y bello arte desde los medios de comunicación no saldrán nuevos aficionados. ¿Y los toros qué?
Los taurinos deben de buscar la excelencia de las corridas que monten para que la gente vaya a la plaza y se ilusione para volver más veces. Son también responsables directos de esta situación
Faltan aficionados. Esto es innegable. Las plazas están medio vacías y esto lo saben los antis. En este grave momento todos debemos defenderla con buena muleta.
Opongámonos a esta marea y difundamos a los cuatro vientos lo grande que es el arte del toreo para emocionarse. Esto no se debe acabar nunca por grandeza, tradición, historia y categoría. No os dejeís dar la estocada.
<<No sé si todos los antitaurinos sois así (seguro que hay gente muy buena y respetuosa), pero los que habéis escrito comentarios en este blog, habéis dado una imagen muy poco democrática: Fascismo puro y duro sin argumentos, solo insultos y amenazas.
ResponderEliminarCreéis que tenéis la razón y la queréis imponer a los demás. ¿Callar la boca a los que piensan diferente?
Yo os voy a dar un argumento:
¿Sabéis que tenían en común, Federico García Lorca, Rafael Alberti , Miguel de Cervantes, Goya, Dalí, Manet, Picasso, Ruben Darío, Juan Ramón Jiménez, Gerardo Diego, José Bergamín, Dámaso Alonso, José María Pemán, Jorge Luis Borges , Carlos Velo, Pablo Neruda, Gustavo Adolfo Bécquer José Picón , Jacinto Benavente, Bizet, Tierno Galván, Vicente Blasco Ibáñez , Camilo José Cela, Tirso de Molina, Miguel Hernández, Valle-Inclán, Manuel y Antonio Machado, Francisco Quevedo, Pérez de Ayala, Jovellanos, Juan Ruiz de Alarcon, Orson Welles, Ernest Hemingway, Peter Viertel, Jean Cau, Ortega y Gasset, Unamuno, Carlomagno, Alfonso X el Sabio, Carlos I de Inglaterra, Miguel Mihura , El Emperador Carlos I, Carlos Arniches, Calderón de la Barca, Fray Luis de León, Alfonso Sastre, Góngora, Benito Pérez Galdós, Jaime de Armiñán, Cossio, Fernando de Rojas, Ginés Pérez de Hita, Vicente Espinel, Juan Enriquez de Zúñiga, Fernán Caballero, Ramón Gómez de la Serna, Nicolás Fernández de Moratín, Duque de Rivas, , José Bergamín, Blasco Ibañez, Bizet, Jean Cocteau, Serafín , Francisco Asenjo Barbieri, Joaquín Álvarez Quintero, Zuloaga, Sorolla, Ramón Casas, Marí Cassatt, Fortuny, Rugendas Lachler...?
Acaso como dice anónimo 18 de junio de 2012 11:18 "¿Son una panda de descerebrados, catetos ignorantes que seguís a una panda de asesinos crueles y bestias?"
¿Porqué disfrutaban con los toros estos señores? Porque lo hacían todos ellos, DISFRUTABAN CON LA TAUROMAQUIA. ¿Acaso no tenían suficiente sensibilidad? ¿Porque vosotros no? Pensadlo un poco.
Animo Don Javier, siga defendiendo la tauromaquia y el AMOR por el toro (sí, con mayúsculas amor) que merece la pena, ya sabe, Ladrán luego cabalgamos¡
C.A.
Buenas, a muchos españoles nos disgusta que se intente ligar "lo español", con los toros; es decir, hacer un pack “toros/España”
EliminarEn la misma línea está el Director de la Cátedra de la Unesco de Gestión Cultural. http://www.uimp.es/blogs/prensa/2010/08/17/director-de-catedra-unesco-de-gestion-cultural-afirma-que-%E2%80%9Clo-identitario-alrededor-de-los-toros-es-excesivo-y-esta-trasnochado%E2%80%9D/
Es innegable que en la época moderna han existido voces contrarias y críticas con la misma (desde la propia España); http://www.lavanguardia.com/politica/20091219/53849165336/los-toros-una-vieja-disputa.html, o como diría Javier Paradinas, “dan la brasa”
Así decía Lope de Vega : ¡Fiesta mortal! A tu inventor primero maldiga el cielo con su mano eterna Mala, con toro manso; buena, fiero que mata, Hiere, pisa y desgobierna. La fiesta es ver morir bárbaro y fiero Contra la condición humana y tierna, Los que no os hacen mal, ni mal os quieren. ¡Bárbaros españoles, inhumanos! Más crueles que idólatras y escitas, Que entre la religión de los cristianos, Leyes fieras tenéis con sangre escritas. ¡Volved los ojos, si lo son de humanos, con lágrimas y voces infinitas, a questa imagen de dolor y miedo del mísero don Diego de Toledo.
Hacer una lista con los "aficionados" es tan fácil como hacer otra lista con los no aficionados o antitaurinos.
Por cierto, a la lista que puso le sobran con toda claridad y a “bote pronto”: Goya, Unamuno, Jovellanos, Jacinto Benavente, Juan Ramón Jiménez, Blasco Ibáñez, o Pérez de Ayala.
Entre los “intelectuales aficionados” y el porqué la respuesta de Concha Caballero, profesora de Literatura. Sevilla y publicada en El País entenderos que no puede ser más clara y adecuada; :
“Los defensores de la fiesta de los toros se han agarrado a la literatura y el arte como a un clavo ardiendo. Citan a Goya y Picasso, a Lorca y a Miguel Hernández, a Hemingway y a Alberti para demostrar el carácter artístico de la muerte y tortura del toro en la plaza.
Convertir la literatura y el arte en fuente de autoridad es más que discutible. Si convertimos las inclinaciones literarias en justificaciones éticas podríamos llevarnos más de un susto. Hemingway no era sólo amante de la fiesta de los toros, sino también de las cacerías de leones, elefantes y animales salvajes hoy protegidos. El inefable Faulkner -es doloroso pero cierto- destilaba un pensamiento segregacionista típicamente sureño; los románticos defendieron el suicidio como la libertad suprema de la existencia y los simbolistas consideraron el alcohol y las drogas como la mano que aparta las veladuras hacia el inconsciente creador. Gran parte de las mejores novelas de aventuras defienden los imperios coloniales; la generación perdida ensalzó el alcohol y la aventura sin límites; los escritores beat nos condujeron por las carreteras de los paraísos artificiales... ¿Hay que convertir toda esa magnífica literatura en argumento de autoridad para el racismo, la defensa del imperialismo, la matanza de animales o el consumo de drogas? Evidentemente no.
(2). Además, los defensores artísticos de la Fiesta ocultan sibilinamente la nómina de escritores que no contemplaban con agrado este espectáculo o que se manifestaron rotundamente en contra, como es el caso de Lope de Vega, Quevedo, Larra, Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez, Benavente, Miguel Delibes y toda la nómina de pensadores de la Ilustración española. Los textos de estos autores que hablan de barbarie, tortura, suplicio, crueldad o inhumanidad, han sido convenientemente silenciados. Pero es que, además, se produce una curiosa metonimia en las citas de algunos de los autores protaurinos. Cada referencia al toro bravo como animal se transmuta, por arte de birlibirloque, en una defensa de la fiesta de los toros, cuando realmente su significado era muy diferente. Muerte, sexo, tragedia están más cerca del simbolismo taurino que de la defensa de los toros como fiesta. Incluso en la mayor parte de los dibujos de Goya es difícil no reparar en las jaurías de perros, carrozas con personajes grotescos y garrochas afiladas, más cercanos a sus pinturas negras que a la exaltación taurina. Especialmente la generación del 27 convirtió la figura del toro en metáfora de España y de su destino dramático. El toro de lidia, sin libertad, acosado, humillado y torturado es el símbolo de la tragedia española y también la imagen de la guerra.
EliminarInterpretar las alusiones taurinas de Miguel Hernández sólo en clave de defensa de los toros es una seria manipulación literaria. "Como el toro he nacido para el luto y el dolor" dirá el poeta o llamará a levantarse al toro de España frente a las cadenas de la opresión. Incluso la cita de García Lorca sobre la "cultísima fiesta de los toros" ha sido mutilada porque sigue con esta frase: "forma el triunfo de la muerte española". Picasso, por su parte, concentró gran parte de la fuerza dramática de su Guernica en esa cabeza de toro que él definió como "brutalidad y oscuridad" y otros como el símbolo de la guerra española.
En mi opinión, la fiesta de los toros se muere porque esa vieja metáfora ha desaparecido, porque España ya no es un toro bravo herido, ni el público sublima la violencia social en las plazas de toros. Porque ni siquiera es el camino para el ascenso social de los que huían de las cornás del hambre, sino un apartado más del papel cuché del corazón. García Lorca decía que "España es el único país donde la muerte es el espectáculo nacional", pero afortunadamente ya no es así. Al caer el simbolismo oculto de esa fiesta, se desprende el velo que nos hacía percibir como rito, escuela o arte, lo que solo era tortura y dolor, carne desgarrada de un bello animal que nos mira en la distancia con la superioridad del inocente. En pleno siglo XXI.”
Entre los grandes escritores antitaurinos del siglo pasado está Eugenio Noel, con auténticas “críticas taurinas”, y no las “almibaraditas” crónicas de “aplausos”, “burladero” u otras revistas “especializadas”. Al toro se le maltrata, martiriza y masacra en la plaza. El toro es ajeno a “labor intelectual” de los ritos humanos. Y esto lo plasmó Noel con toda rotundidad y objetividad.
En la actualidad la mayoría de los españoles si bien "no les molesta" que a su país se le asocie con esta idea son contrarios al maltrato y tortura de los toros en base a esta tradición.
¿Existe alguna manifestación cultural que tenga un partido político a favor de su abolición?.
En España y en el caso de “los toros” si. ¿Se imaginan un partido político que intentara abolir la danza, la literatura o música clásica?
El toro no debe ser distinto en protección a otros animales.
"About morals, I know only that what is moral is what you feel good after and what is immoral is what you feel bad after."
ResponderEliminarErnest Hemingway
¿Le vais a dar lecciones de moral a nuestro tío Ernest? (Lo siento pero no sois más que unos puritanos moralistas) El lo tenía muy claro:
"Bullfighting is the only art in which the artist is in danger of death and in which the degree of brilliance in the performance is left to the fighter's honor".
Ernest Hemingway
"Desde un punto de vista moral moderno, es decir, cristiano, la corrida es completamente indefendible; hay siempre en ella crueldad, peligro, buscado o azaroso, y muerte."E. Hemingway
EliminarMuy interesante también:
ResponderEliminarLos taurinos, conocidos ya por todos nosotros por su especial habilidad para meter en sus listas de adeptos a diestro y a siniestro (sobre todo a siniestro), aprovechan el estado mortal de cualquier poeta, escritor, pintor, etc. para inventarse la supuesta afición taurina de reconocidos personajes (estando muertos no pueden defenderse, lógicamente). Hace tiempo leí en un medio taurino que Juan Ramón Jiménez era un apasionado de las corridas de toros. Mi estupefacción fue similar a la que siento cuando leo el nombre de Goya en parecidas circunstancias. Por supuesto, no soy ninguna eminencia en lo que a la obra de este poeta onubense se refiere, y aún menos de su vida, pero cualquiera que haya leído Platero y yo puede percibir una sensibilidad y respeto hacia los animales muy superiores al de otros escritores contemporáneos.
Los cuidados que recibía Platero y los diálogos que el poeta mantenía con él, nos rebelan la ternura de Juan Ramón y el dolor que sentía al presenciar el maltrato o asesinato de cualquier burro, perro o pajarillo. Por estos detalles de su personalidad que se perfilan en su obra, creo que la supuesta afición taurina que pretenden presentar los defensores de esta cruel tradición es una falsedad más de las que hay que añadir a la ya larga lista creada por estos “artistas” del engaño.
En el capítulo Los toros Juan Ramón le dice a Platero: “¿ A que no sabes, Platero, a qué venían esos niños? A ver si yo los dejaba que te llevasen para pedir contigo la llave en los toros de esta tarde. Pero no te apures tú. Ya les he dicho que no lo piensen siquiera...” El poeta no sólo no permite que Platero sea utilizado durante el festejo, sino que él y su burro salen del pueblo antes de que la corrida comience: “A eso de las dos, Platero, en ese instante de soledad con sol, en ese hueco claro del día, mientras diestros y presidentas se están vistiendo, tú y yo saldremos por la puerta falsa y nos iremos por la calleja al campo, como el año pasado... ¡Qué hermoso el campo en estos días de fiesta, en que todos lo abandonan!”. Si Juan Ramón hubiese sido un aficionado taurino ¿no habría aprovechado la ocasión para acudir a la “fiesta”? ¿No habría permitido que Platero formase parte de ella? Juan Ramón decide irse al campo, y añade: "como el año pasado". No era la primera vez que el poeta prefiere aislarse de estos festejos celebrados en Moguer. http://delavidaylapalabra.blogspot.com.es/2011/01/juan-ramon-jimenez-y-la-tauromaquia.html
Muchas gracias "anónimo" lo tengo y lo he leído. El parte de una visión general acertada (desde el punto de vista moderno, etc...) para después hacer las particularidades que cada persona puede experimentar sobre la vivencia en la plaza. Y esa "experiencia" está influenciada precisamente por la "empatía" que tiene cada persona individualmente sobre el animal. (animales; toro y caballo)
EliminarLa "corrida" es una creación humana. El animal únicamente sufre; no se siente protagonista del protagonismo que precisamente se supone que le da el humano.
Como sabrás a principios del siglo pasado incluso se hacían "luchas de fieras" (toros-leones, toros-osos),http://hemeroteca.abc.es/nav/Navigate.exe/hemeroteca/madrid/abc/1962/05/22/019.html; prácticas afortunadamente absolutamente superadas. (lo mismo pasará con las prácticas actuales)
Ortega ya dijo en su momento que la corrida se debía de mantener intacta refiriéndose a la nula protección que tenían los caballos; ya que cualquier "variación" haría que paulatinamente ¿"la fiesta"? (no me gusta esa denominación) desaparecería.
Tú sabrás mejor que yo los auténticos enemigos actuales de las corridas cuáles son.
Las corridas tienen un componente sádico innegable (supongo que lo conocerás, pero te dejo este enlace de un psiquiatra http://es.scribd.com/doc/81848267/Psicologia-de-la-aficion-taurina). Es decir, las corridas siguen porque también tienen que existir "víctimas" entre los toreros. En los últimos "festejos" de Sevilla y Madrid, aparte de las tripas del pobre caballo Xelín se debería haber contado por lo menos con 20 toreros muertos o accidentados graves en consideración al número de "toros" sacrificados ¿cuántos ha habido? Me parece que los actuales "toreros" van de "señoritos" o también que haya demasiado fraude en ese mundo (bueno, si buscas en el buscador la palabra fraude-toros- te salen un montón de enlaces; que si afeitado, etc; ) Es decir, las "corridas" ya están moribundas por sí mismas. Me parece que se trampean las corridas para que precisamente el daño al torero quede minimizado.
Y eso es el mayor peligro (desde vuestro punto de vista) para que las corridas continúen.
Es decir a los antitaurinos nos va a dar igual “la casta”, “el encaste”, la “bravura” o conceptos similares porque únicamente nos fijamos en la tortura que se infringe gratuitamente a un animal.
Cómo no, todas estas “ideas” las plasma mejor que yo Ignacio Sánchez Mejías (http://blancoyoro.blogspot.com.es/2011/09/la-tauromaquia-por-ignacio-sanchez_28.html).
Está claro que el ser humano no va a poder acabar “nunca con las guerras”; nos lo pone caro Sánchez Mejías (esta mañana he leído el texto completo en un libro de la FNAC, que también nombraba las peleas de gallos y las palizas a “los negros”; pero muchas sociedades en que estas costumbres fueron exportadas (Latinoamérica) las sociedades ya están lo suficientemente maduras para abandonar el antropomorfismo inherente a “las corridas” y darse cuenta de que el animal no se merece el trato que se le da. Ejemplo, Bogotá o Panamá http://www.pacma.es/n/12854/bogota_prohibe_uso_de_plaza_de_toros_para_las_corridas
A vueltas con el poeta Juan Ramón Jiménez, dejo unas conocidas palabras suyas para clarificar su posicionamiento frente a lo taurino:
ResponderEliminar"¿La cima (que es la sima) de mi antipatía? Una misa de campaña, en una plaza de toros, cosa frecuente en España. El cura, el militar, el torero… y el público de ellos tres."
Me parece que no es necesario añadir más.